En el sigueintes articulo pretende esxplicar los principales factores que afectaron al dolar duarante el 2021 y su relación con la pandemia del COVID-19
El dólar estadounidense (USD) es la moneda más poderosa del mundo y es la divisa principal de la mayor economía del mundo. Igualmente. Solo en mercados OTC, como Forex, el dólar estadounidense representa el 88% de las operaciones. (Forex mueve volúmenes de operación arriba de los 5 billones de dólares diarios). Además el USD es la moneda de comercio de las principales instituciones financieras a nivel mundial.
En 2020, cuando el virus COVID-19 causó estragos en todo el mundo, paralizó las economías globales. EE.UU. ha estado a la cabeza del impacto, liderando el número de casos y muertes. Las elecciones presidenciales de EE.UU. también tuvieron un fuerte efecto sobre el dólar y al parecer esta volatilidad en los mercados financieros (sobre todo con el precio y la demanda del petróleo) han dejado al descubierto, quizás, las primeras señales de que el panorama económico mundial está por cambiar.
La política de la Reserva Federal en 2021
El papel de la Reserva Federal, ha jugado un papel vital en esta crisis y se puede decir que ha dado alivio a la golpeada economía estadounidense tras la pandemia. El banco central más poderoso del mundo, seguirá con su plan de compra de dólares y la venta de divisas, al menos por dos años más; La Reserva Federal ha dado indicaciones de que mantendrá los tipos de interés cerca de cero hasta al menos 2023 y seguirá comprando bonos para apoyar a la economía estadounidense.
La Reserva Federal está comprando al menos 120.000 millones de dólares al mes y está dispuesta a aumentar la compra si es necesario. Contrariamente a las reacciones en el Reino Unido y la zona euro, esto ha provocado una devaluación directa del dólar.
Los tipos de interés del banco y los compromisos de la QE (Siglas en inglés del término “flexibilización cuantitativa”) no van a permanecer constantes para siempre. La revisión de la política de la FED (sistema de reserva federal) en 2020 buscaba obtener la mayor tasa de empleo posible y la estabilidad de los precios, incluso acogiendo con satisfacción los signos de subida de precios que reflejaban una economía en crecimiento y también compensando el estancamiento de la inflación en los años anteriores.
Sin embargo en 2020, con la pandemia planeando sobre la economía, los precios avanzaron demasiado rápido y la crisis hizo que la oferta se cerrara ante la falta de demanda.
Se prevé que una vez que todo se encauce y la gente vuelva a su vida normal, la situación económica mejorará, aumentando el ritmo de consumo. En estas circunstancias, la demanda puede superar a la oferta y provocar un aumento de los precios a corto plazo, pero si la pandemia se extiende y agrava la crisis en el corto plazo, el dólar podría sufrir consecuencias nunca antes vistas en la economía mundial.
Debido a la desglobalización, la inflación a largo plazo va a ir en aumento. La pandemia ha demostrado que, en lugar de depender de las importaciones baratas, es necesario apoyar y abastecerse de productos a nivel local.
Para combatir la subida de los precios, la Reserva Federal podría aumentar los tipos de interés; esto fortalecerá el dólar, aunque parece poco probable que la Reserva Federal suba los intereses cuando se vea afectada por la inflación, podría retirar la compra de bonos o subir los tipos en 2022. Cualquier indicio de que la Reserva Federal está siendo más estricta en sus políticas monetarias podría molestar a los mercados de divisas.
Vacunación
El proceso de vacunación a nivel mundial en todo el mundo ha tenido un efecto diferente en las distintas divisas. Las esperanzas depositadas en las vacunas han impulsado al euro, pero el dólar ha bajado.
En la mayoría de los países de la Unión Europea y en el Reino Unido se aceleraron las campañas de vacunación en el primer trimestre de 2021. El progreso compensó las elevadas tasas de casos lo suficiente como para impulsar la libra Esterlina al alza y proporcionar la esperanza de que las cosas vuelvan pronto a la normalidad. Mientras Estados Unidos se enfrenta a las infecciones y a las vacilantes tasas de vacunación, el dólar podría continuar su descenso.
Sin embargo, a los científicos les preocupa que las vacunas puedan ser ineficaces contra las mutaciones del virus, por lo que la incertidumbre sigue siendo muy alta. Esto podría obligar a los investigadores a empezar de cero y rehacer sus inoculaciones y por ende la prolongación de los efectos de la pandemia, cualquier retraso en la resolución de los problemas médicos ralentizará la recuperación.
Estímulo fiscal en EE.UU.
En diciembre de 2020, un mes antes de dejar el cargo, el ex presidente estadounidense Donald Trump había firmado una ley de estímulo que liberaba 900.000 millones de dólares en fondos de ayuda de emergencia. En enero de 2021, el presidente Joe Biden firmó un paquete de estímulo de 1,9 billones de dólares que también incluirá subsidios de desempleo, programas de vacunas y fondos para que los funcionarios locales soporten lo que queda de la pandemia.
¿Qué significan unas cantidades tan asombrosas para el dólar? Aparte de las ayudas, los complementos de seguro y las prestaciones, el paquete fiscal podría levantar la colapsada infraestructura economía estadounidense y mitigar el dolor causado por un año de restricciones económicas. Sin embargo, si la pandemia se alarga para el 2023 la abundancia de estímulos monetarios y fiscales tendrá efecto negativo en el índice del dólar.
Relaciones comerciales mundiales
Estados Unidos y China, en la actualidad, son los actores más importantes de la economía mundial (ambos países representan alrededor del 40% de la actividad económica mundial). Las relaciones comerciales y tecnológicas entre China y Estados Unidos han sido tensas durante los últimos años. Una guerra comercial hostil bajo el anterior presidente Donald Trump vio cómo se imponían aranceles a una serie de bienes comercializados entre ambos países. En 2020, EE.UU. y China se enfrentaron por la transparencia sobre el origen del virus COVID-19.
Con el presidente Biden al mando, ¿se profundizará o disminuirán las tensiones? Las mayores economías del mundo siguen dependiendo en gran medida la una de la otra, y una tregua ocasional pesaría sobre el dólar.
Las sanciones adicionales contra las empresas chinas podrían enviar a los inversores a la seguridad del dólar estadounidense. Si las actuales disputas comerciales no se resuelven bajo las reglas de comercio establecidas en la Organización Mundial del Comercio (OMC), las tensiones estadounidenses serán probablemente un factor positivo para el dólar en 2021.
Actuación del Banco Central Europeo
El sistema bancario central de Estados Unidos, en comparación con el Banco Central Europeo (BCE), es más poderoso. Sin embargo, el BCE tiene una influencia creciente sobre el dólar. En 2020 la BCE presentó un programa de compra de bonos de emergencia para hacer frente al shock económico de la pandemia.
Se utilizaron 1,35 billones de euros para ampliar el Programa de Compras de Emergencia para la Pandemia (PEPP) del BCE. Esto ha servido de apoyo al euro y a la economía de la zona euro durante la crisis del coronavirus; impulsando el euro al alza y contribuyendo a la debilidad del dólar.
El BCE podría dejar que su programa caduque a principios de 2022, lo que pesaría sobre el euro y apoyaría al dólar. Además, es posible que el banco siga recortando su tipo de depósito por debajo del -0,50%, una medida que deprecia la moneda frente a las otras divisas principales.